La gran noche chipriota


22/03/2012

El pasado 7 de Marzo el Apoel FC se convirtió en el único equipo en la historia de Chipre en llegar a Cuartos de Final de la Liga de Campeones. Después de liderar su grupo de clasificación (recordemos que viniendo de la fase previa), el próximo rival del Real Madrid, eliminó de manera heroica al Olympique de Lyon en Octavos de Final. Sin duda un acontecimiento que no olvidarán los habitantes de ese pequeño país. Como tampoco olvidarán otra noche mágica que fue de infausto recuerdo en España.

El 5 de Septiembre de 1998, la selección española de fútbol, con Javier Clemente al frente, comenzaba su andadura hacia la Eurocopa de 2000 después del batacazo sufrido en el Mundial de Francia, donde no fue capaz de pasar de la primera fase. Poco suponía el veterano técnico vasco que ese sería su último partido como seleccionador nacional.

Un equipo mal dibujado, con Hierro sobrepasado y desubicado como medio centro, con Raúl y Etxeberría escorados en las bandas demostrando claramente que ese no era su hábitat y con Luis Enrique, Morientes y Alfonso en la delantera, obligados a realizar funciones para las que no estaban llamados, sucumbió ante la correosa selección chipriota.

El equipo estaba fracturado por la mitad y ninguna de las líneas fue capaz de sobrevivir con dignidad, propiciando las continuas llegadas y el lucimiento chipriota que hasta se permitió el lujo de meter un gol de vaselina.

Esta derrota (3-2) acabó con el mito del férreo vínculo de Clemente con sus pretorianos. Si algo destacó las crónicas de ese partido fue la evidente falta de ambición y actitud del colectivo. Parecía que los jugadores ya no sacaban la cabeza por su seleccionador. Sin duda el equipo ya estaba muy tocado con la prematura eliminación en el Mundial de Francia y ese partido no fue si no la gota colmó el vaso.

Javier Clemente fue destituido de su cargo y dio paso a José Antonio Camacho, el cual enderezó el rumbo después de este accidentado comienzo consiguiendo la clasificación para la Eurocopa de 2000. Aquella fase de clasificación también se recordará por un abultado marcador: el 9-0 que le endosó España a Austria en Mestalla el 27 de Marzo de 1999. En él, Raúl González, uno de los protagonistas de la debacle chipriota, se resarció anotando 4 goles. Y es que a veces el fútbol no deja de ser un estado de ánimo.




José Manuel Hernández
Lic. Economía, Universidad de Salamanca
MBA, Escuela Europea de Negocios
Consultor en Deloitte
Twitter: @josemahg
blog: www.pedalier.blogspot.com


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